Cabezas gigantes, árboles con muñecas y casas flotantes, estos lugares de América Latina se han ganado su lugar entre las islas más extrañas del mundo. Aquí te contamos sus historias y por qué no te las puedes perder.
Isla de las Muñecas: un territorio donde reina el terror
Famosa tanto por sus habitantes como por su apariencia, la Isla de las Muñecas se encuentra al sur de la ciudad de México. La chinampa que fue construida entre los canales de Xochimilco recibe a miles de turistas cada año y es el escenario de una trágica leyenda.
Su aspecto, que para algunos puede ser siniestro y para otros simplemente extraño, responde a las necesidades del antiguo dueño, Julián Santana. Según cuentan una menor falleció en los alrededores del territorio. A partir de ahí, todo es especulación. Mientras que algunas personas aseguran que Santana comenzó a colocar las muñecas como un homenaje a la niña, otras versiones cuentan que, en realidad, eran para ahuyentar su espíritu.
De sus árboles cuelgan cientos de figuras humanas de plástico y se realizan recorridos por la insólita isla que no te puedes perder si visitas la ciudad de México.
Las casas flotantes del Lago Titicaca
Una ciudad artificial fue construida sobre el lacustre panorama del Titicaca. Tejidas por sus habitantes desde hace miles de años para evitar conflicto bélico con los incas, las casas flotantes combinan perfectamente el arte y la ingeniería para darles a los habitantes del Lago un hogar. Para crear la plataforma, las personas de Uros apilan raíces y tallos de las totoras, una planta que crece en los alrededores de su territorio.
A pesar de no ser un sito tan reconocido por el turismo mundial, el islote artificial del Lago Titicaca asombra a sus visitantes por su complejidad.
La enigmática Isla de Pascua
Con volcanes, colosales cabezas y playas la ‘isla grande’ o Rapa Nui como la conoce la gente local es un paraíso y un misterio. Es uno de los lugares más remotos del mundo y durante la pandemia por COVID-19 en 2020 se mantuvo completamente aislada por varios meses.
La isla chilena es famosa por sus monumentales móai, estructuras antropomorfas que se yerguen decenas de metros de altura. Sabemos que los torsos de muchas de ellas se encuentran sepultados debajo de la tierra pero el estimado de estatuas que podría haber en la isla sigue siendo un misterio. Como guardianes de la isla, los móai que se han encontrado están en los alrededores del territorio.
Por otro lado, las increíbles vistas naturales, como el cráter del volcán Rano de Kau hacen de esta isla del Océano Pacífico una parada remota pero indispensable si estás buscando una aventura donde te adentres en la naturaleza y la cultura.
Fuente: National Geographic