Desde las Salinas Grandes en Jujuy hasta los glaciares en la Patagonia, cada región del país cuenta con cientos de atractivos turísticos naturales que invitan a descubrir la magia de la madre tierra en todo su esplendor.
Pero hay un lugar en particular que ha llamado la atención en las redes sociales: un arroyo de intenso color turquesa en la provincia de San Juan. Muchos piensan que se trata de una ilusión óptica o un arreglo con un programa de edición de fotografía o video, pero la verdad es que es un espectáculo natural único que ha dejado sin palabras a todos los que lo visitan.
Este pequeño arroyo, cuyas aguas descienden desde el Mercedario, la cuarta cumbre más alta de América, se ha convertido en la joya de la zona gracias a su singular color, que lo hace uno de los lugares más codiciados para visitar en San Juan y un fenómeno de estudio.

El color turquesa intenso del arroyo es producto de la naturaleza, una paleta de colores que no permite pestañear, y en conjunto con los tonos marrones y ocres de los imponentes cerros que lo rodean, crean una impactante vista que te dejará sin aliento. Cada vez que contemples el paisaje, te asombrarás de su belleza y te preguntarás si estás soñando.
Este espectáculo natural se debe a los minerales que contiene el agua del arroyo, en especial el cobre. Cuando el cobre se oxida, las aguas adquieren un tono turquesa que es simplemente sorprendente. Los sedimentos depositados en el fondo del arroyo también contribuyen a este asombroso efecto visual, cubriendo paulatinamente las piedras del arroyo con el azul del óxido de cobre.
Si eres un amante de la naturaleza y te apasiona la aventura, no puedes dejar de visitar este rincón de San Juan y maravillarte con la belleza del «Arroyo Turquesa». Sin duda, será una experiencia que quedará grabada en tu memoria para siempre. No esperes más, ¡anímate a vivir esta experiencia única!
