El turismo internacional mostró una recuperación significativa en 2024, con 1.100 millones de turistas que viajaron a nivel global en los primeros nueve meses del año, alcanzando el 98% de los niveles previos a la pandemia. Según el Barómetro de la ONU Turismo, se espera que para el cierre del año se haya alcanzado la recuperación plena del sector, pese a desafíos económicos, geopolíticos y climáticos. La mayoría de las regiones han superado ya las cifras de llegadas de 2019, y los ingresos por turismo internacional muestran un crecimiento de dos dígitos en comparación con ese año.
En América, la recuperación fue notable, alcanzando el 97% de las llegadas previas a la pandemia. Países como Colombia y Curazao experimentaron un crecimiento destacado del 36% y 48% respectivamente. Además, Estados Unidos, líder mundial en ingresos turísticos, registró un incremento del 7%, mientras que Canadá creció un 35% y Nicaragua un 50% en términos de ingresos por turismo. Estas cifras reflejan una recuperación robusta en la región, impulsada por el aumento del gasto de los visitantes y la prolongación de las estancias, reseña ONU Turismo en una gacetilla de prensa.
A nivel mundial, Oriente Medio lideró el crecimiento, con un incremento del 29% en llegadas en comparación con 2019, seguido por África y Europa, que también superaron los niveles pre-pandemia. En Asia y el Pacífico, la recuperación fue más gradual, alcanzando el 85% de las cifras de 2019, aunque notablemente superior al 66% registrado en 2023. Este desempeño fue apoyado por el incremento de la conectividad aérea y la facilitación de visados, que fomentaron el retorno de los viajes internacionales.
Los ingresos por turismo internacional presentaron resultados excepcionales, con 35 de los 43 países con datos disponibles superando los niveles de 2019. Japón, Turquía, España y Francia destacaron con crecimientos de dos dígitos en ingresos, mientras que economías emergentes como Pakistán (+64%) y Nicaragua (+50%) mostraron un progreso significativo. Este incremento, que supera la inflación en la mayoría de los casos, contribuye directamente al empleo, las pequeñas empresas y la balanza de pagos de los países.
Aunque el sector turístico ha alcanzado niveles casi plenos de recuperación, enfrenta desafíos persistentes como la inflación en transporte y alojamiento, conflictos geopolíticos y fenómenos climáticos extremos. Pese a ello, el aumento del gasto promedio por viaje y la extensión de las estancias han permitido que el turismo internacional mantenga un impacto positivo en las economías globales, consolidando su recuperación en 2024.
