Aluminé es un encantador pueblo de montaña ubicado en el centro oeste de la provincia de Neuquén, a 340 kilómetros de la capital provincial y a unos 144 kilómetros de San Martín de los Andes.
«Es un pueblo de montaña, se accede por una cuesta que nosotros llamamos la Cuesta del Rahues, que es una cuesta zigzagueante de siete vueltas, desde un punto que se pueden ver los tres volcanes, el volcán Danín, que es de Argentina, y dos de Chile, así que estamos ubicados en un maravilloso paisaje cordillera», señaló Solcire Luengo, responsable de Turismo de esa localidad.
El turismo que caracteriza a la localidad es mayormente de cercanía, ideal para familias. “Más cerquita, más familiero”, así lo describió Luengo, quien aseguró que uno de los grandes atractivos es la abundancia de agua dulce, con lagos y ríos que permiten diversas actividades como rafting, kayak y pesca, convirtiendo a Aluminé en un destino perfecto para quienes disfrutan del contacto con la naturaleza.
Durante el mes de mayo se realiza la Expo Alumiel, que este año celebra su séptima edición del Encuentro de Apicultores Patagónicos. “Son tres días donde se dictan distintas charlas técnicas y también hay una opción de gastronomía, de espacio donde van artesanos a vender sus artesanías, productos apícolas, por supuesto, y también un espacio donde generamos música y un buen rato para pasar para la comunidad en general y para los vecinos”, destacó.
En otoño, el entorno se llena de colores únicos. “Hay mucho ñiere, coirón, ciprés, bosques de araucaria, que en esta época las tonalidades de colores son maravillosas”, explicó Luengo. Alrededor del pueblo se encuentran distintos parajes, cada uno con su lago o río, que embellecen aún más el paisaje.

Aluminé tiene aproximadamente 7.000 habitantes, aunque su población sigue creciendo. Es un pueblo pequeño y familiar. Luego señala que lo ideal es una estancia de 3 o 4 noches para recorrer el centro, el río Aluminé, la Reserva Natural Quilque Lil, el Museo Municipal y circuitos cercanos como Quillén, Ñorquinco, Pulmari y Rucachoroi. Estas visitas se combinan con caminatas, trekking, y en verano, actividades acuáticas.
En invierno, la nieve cubre los parajes cercanos y los visitantes pueden disfrutar del parque de nieve Batea Mahuida, gestionado por la comunidad mapuche Puel. «Está buenísimo, sobre todo para aquellos que arrancan con el esquí, conocer la nieve, es un hermoso espacio», afirmó.
El turismo extranjero también llega, especialmente desde Chile. Eventos como el Mundial de Rafting 2018, campeonatos de kayak creek y el Sudamericano de Slalom han posicionado a Aluminé como un referente en deportes acuáticos en la montaña.
En cuanto a la oferta gastronómica destacan mucho las parrillas, las pastas, y la combinación con la trucha.
Finalmente, Luengo comentó que toda la información turísticas de la localidad se encuentra disponible en la página oficial “Destino Aluminé” y sus redes sociales.
